Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Alicante han detectado varias irregularidades en cartillas veterinarias de varios perros que habían sido llevados a clínicas veterinarias de Orihuela. El SEPRONA investiga a una mujer que las entregaba con pegatinas de vacunaciones que no habían sido firmadas ni selladas por ningún facultativo.