El equipo de gobierno de Orihuela hará realidad una vieja reivindicación de la pedanía de Molins ya que ayer procedió a formalizar la compra de unos terrenos que acogerán las instalaciones deportivas. La operación supone un coste de 130,000 euros para que una parcela de 5.700 metros cuadrados pasen a ser de propiedad municipal. El ayuntamiento invertirá en las instalaciones en torno a los trescientos mil euros.