El Saladar sobrevive en estos días posteriores a la riada. Una semana después, esta pedanía de Almoradí sigue sin agua y aterrada por lo sufrido tras la inundación que anegó hogares, comercios y huertos de cultivo.
El Saladar sobrevive en estos días posteriores a la riada. Una semana después, esta pedanía de Almoradí sigue sin agua y aterrada por lo sufrido tras la inundación que anegó hogares, comercios y huertos de cultivo.