Se inicia el proceso de adjudicación excepcional de una veintena de viviendas en Callosa de Segura. Siete se destinarán a jóvenes menores de 35 años, tres a mayores de 60 años, tres a familias monoparentales, dos a mujeres víctimas de violencia de género y tres viviendas a personas con diversidad funcional en cualquier miembro de la unidad de convivencia. Las cuatro viviendas restantes serán adjudicadas por la modalidad de adjudicación ordinaria. Estas viviendas han estado en el foco de la polémica todo este tiempo. Vecinos del céntrico edificio callosino se muestran en contra de destinar estas casas a alquiler social.