Todos las personas que trabajan y estudian en el Colegio Público Fernando de Loaces de Orihuela son las que han hecho posible con su implicación que los 28 niños de educación especial que asisten cada día tengan cierta calidad de vida en este centro, en el que la Consellería habilitó un aula específica para ellos, aceptó la matriculación y todavía, seis meses después, no ha dotado de educadores.