Bigastro penaliza con 20.000 euros en la facturación al servicio de recogida de basuras y limpieza viaria, que lleva la empresa Sirem, y contrata a una persona para que supervise el trabajo realizado en el municipio después de más de un año conociendo las deficiencias del servicio y ocasionando multitud de quejas vecinales, según indica el Partido Socialista de Bigastro.