La reducción de caudales para riego que prevé el MITECO en la cuenca del Tajo, el abandono de la provincia de Alicante por parte del Consell y la Generalitat en relación al plan hidrológico del Júcar, los bajos precios en origen por la inactividad de la Ley de Cadena Alimentaria, los acuerdos con terceros países para la importación de productos agrarios sin control y la escalada inasumible de precios de producción provocan que los agricultores de la provincia retomen las movilizaciones en defensa del sector.