La Generalitat tiene previsto llevar a cabo un proyecto de reforma del palacio Marqués de Rafal de Orihuela tras encontrarlo en pésimo estado, sin accesibilidad y sin licencia de uso para oficinas. Van a subsanar las deficiencias y adecuar las condiciones a la normativa vigente en materia de seguridad y prevención de riesgos. El gobierno autonómico asegura que un informe desaconseja que el palacio pueda tener un uso administrativo, con actividad de despachos y oficinas, sin las correspondientes reformas en profundidad.