A los inconvenientes que sufre el cultivo de la alcachofa con la sequía hay que sumar un problema más: los robos que se han producido en la comarca en las últimas semanas. En varias fincas situadas en Orihuela, San Miguel de Salinas y Redován se han robado cerca de mil kilos. También se ha robado un transformador de luz que ha impedido el riego de 30 hectáreas.