Algorfa y Almoradí llevan más de cuarenta años unidos a unos pueblos de Francia. Un hermanamiento enriquecedor que se formalizó en 1992, invitando a sus vecinos a participar en intercambios culturales cada año y que décadas después sigue vivo.
Algorfa y Almoradí llevan más de cuarenta años unidos a unos pueblos de Francia. Un hermanamiento enriquecedor que se formalizó en 1992, invitando a sus vecinos a participar en intercambios culturales cada año y que décadas después sigue vivo.