La Guardia Civil y la Policía Nacional han desarticulado un grupo criminal que, asentado en las provincias de Alicante y Málaga, robaban vehículos de media a alta gama a refugiados en España por la guerra en Ucrania, para su posterior falsificación y venta a compradores de cualquier país de Europa. Cuando algunas de las víctimas trataban de pedir ayuda en redes sociales para localizar su coche robado, los autores contactaban con ellos y les pedían un rescate para devolverles su coche.