Las obras para dotar a la desalinizadora de más energía eléctrica para que de esta forma pueda doblar su capacidad de producción se están llevando tal y como se comprometió el ministerio de medio ambiente. Inició así en agosto las obras de emergencia para incrementar el uso de las desaladoras como respuesta a una situación excepcional de sequía en regiones en las que a la elevada demanda por el turismo se une a las necesidades de los agricultores.