El monasterio de Las Salesas de Orihuela, cinco años deshabitado, tras dos siglos de actividad ininterrumpida, vuelve a tener vida con la llegada de seis monjas de la congregación peruana Pro Ecclesia Sancta.
El monasterio de Las Salesas de Orihuela, cinco años deshabitado, tras dos siglos de actividad ininterrumpida, vuelve a tener vida con la llegada de seis monjas de la congregación peruana Pro Ecclesia Sancta.